La cocina, eso sí que es un arte, y es que realmente, hay en la gastronomía un saber hacer que sintetiza de un solo golpe, todas y cada una de las sensibilidades humanas, despertando los 5 sentidos, de un solo bocado. Porque la comida entra a través de la vista y del olfato, en un primer momento, y a continuación, es el sentido del tacto el que entra en acción, antes de llegar a la boca, donde el gusto, le concede su beneplácito, sin olvidarnos del oído, que se provoca a medida que sentimos las diferentes texturas.
A todos nos encanta comer, probas diferentes sabores y texturas, distintas combinaciones, capaces de desenterrar sensaciones que casi teníamos desenterradas. Pero no es siempre es fácil sorprenderte de manera positiva, a través de la comida. Y es que, ¿cuántas veces hemos querido conocer y probar esos platos tan ricos de ese restaurante tan chic y tan exclusivo, del que todo el mundo habla, y nos hemos llevado un chasco? Porque recetas sabrosas, se consiguen sin problema, pero hace falta algo más que una buena combinación de ingredientes para acertar. Todos y cada uno de nuestros sentidos deben ser estimulados. Y es aquí donde reside el verdadero arte culinario. La explosión, debe afectar al cuerpo íntegramente, sin olvidar nada.
De un tiempo a esta parte, la gente se ha vuelto más selectiva a la hora de organizar un evento, o algún tipo de celebración en la que haya comida de por medio. Hoy, se entiende que la gastronomía es un arte, una especie de representación, y como tal, necesita un buen escenario. ¿Y qué mejor escenario que la naturaleza? Esto es lo que se demanda hoy, un ambiente adecuado, el tipo de entorno que se merece una celebración.
Y si hablamos de paisajes únicos, no podemos dejar de hablar de Galicia, con su mar y su montaña, con su verde y su gris, con su sol y su lluvia. Un pueblo lleno de contrastes, y digno de conocer de punta a punta, tanto la costa como el interior. De hecho, aunque la costa gallega sea el mayor reclamo de la comunidad, el interior de Galicia, encierra parajes inimaginables, como el Cañón del Sil. Y aquí, en Ourense, se puede disfrutar de la gastronomía, en un entorno sin igual, con Catering A Morena, una opción perfecta para celebrar cualquier tipo de evento, ya sea una boda, una comunión, u otro tipo de evento, familiar o de empresa. Sin duda, es el sitio perfecto para una fiesta, y disfrutar de las recetas tradicionales de la comarca, con el mejor servicio, y en un lugar de ensueño. Porque si el tiempo acompaña, no hay nada más agradable que el aire libre para pasar un rato agradable, en compañía de amig@s, familiares o compañer@s.
La culinaria tiene su origen en las preparaciones tradicionales
Cada pueblo y cultura, tienen un arte culinario diferente, pero, la globalización, ha hecho posible, la introducción de recetas extranjeras en la mayor parte de los países del mundo, y hoy es posible saborear los más ricos platos de todo el mundo, sin necesidad de movernos de casa. En Cátering La Frolita, en pleno centro de Madrid, tienen una impresionante oferta de productos típicos de la cocina de otras regiones. Su impresionante carta recoge las recetas tradicionales de la cocina italiana, francesa, alemana, española, americana y argentina, adaptando su presentación a las necesidades de una mesa de Cóctel contemporánea. Con una presentación elegante y práctica y una variedad que se ajusta a todo tipo de eventos, incluyendo los temáticos, La Frolita ofrece pequeños bocados llenos de sabor y color, recetas tradicionales que encantan a tod@s. Vemos, pues, que no es necesario viajar para probar platos foráneos.
El arte culinario es el arte de preparar y cocinar los alimentos, y es una expresión de las mismas manifestaciones artísticas del momento, pero por medio de la comida.
En hostelería y restauración, la culinaria, provoca reacciones concretas en los comensales, que esperan que los platos servidos, presenten los estándares de calidad establecidos, y en base a la normativa vigente, relativa a la higiene y manipulación de los alimentos. Así mismo, se espera que l@s chefs, tengan la preparación adecuada, para dirigir el departamento de cocina. Algo que, te aseguro, encontrarás en los dos ejemplos anteriores.