Con la llegada de una nueva estación es el momento de adaptar la decoración de nuestro hogar a las nuevas temperaturas climáticas, y máximo con la llegada del otoño, en esta estación los días comienzan a ser más cortos, las temperaturas más bajas y ya parece que estamos en el anticipo de las navidades. Es el momento idóneo para crear una vivienda más cálida, más acogedora, más hogareña, que nos invite a entrar, sentarnos, relajarnos y disfrutar, y para ello no tenemos que hacer grandes inversiones, puesto que solamente con unos pequeños cambios en los textiles de nuestro hogar le daremos ese nuevo aire que deseamos.
El salón es el espacio más vivido de una vivienda, es el lugar de reunión de la familia, de juegos, de charlas, de películas y de siestas, por lo que podemos comenzar por renovar la tapicería del sofá. Este es posiblemente el elemento de nuestro salón que más espacio ocupa, por lo que la tela que escojamos para su tapizado va a supeditar la decoración del resto de la estancia.
Varias serán las cuestiones que nos podemos plantear a la hora de decidirnos por un tejido u otro como, por ejemplo:
– El tipo de tejido. En el mercado encontraremos una amplísima variedad de tejidos para tapizar los sofás, sin embargo, los más idóneos son:
-Terciopelo. Es un tejido cálido, amoroso, que aporta confort, a la vez que se muestra lujoso y elegante, vistiendo perfectamente la estancia y elevando cualquier decoración.
– Pana. Es una variedad de terciopelo a rayas, que en los últimos años ha vuelto a revivir con una gran fuerza, nos aporta dinamismo, modernidad, calidez y una gran robustez.
– Algodón. Es el tejido natural por excelencia, transpirable, duradero, atemporal y muy atractivo.
– Lino. Es un tejido de textura de fibras naturales, elegante y atemporal, ya que no pasa de moda. Aporta frescura al ambiente y posee un tacto muy agradable. No obstante, si vosotros no os queréis arriesgar a la hora de optar por uno u otro tejido, nosotros os recomendamos que os paséis por la web de Rioma, la cual se distingue por su creatividad e innovación, y os dejéis aconsejar por los expertos en la materia.
– El color del textil. Actualmente las líneas base de la decoración pasan por escoger textiles de tonos neutros como el crudo, piedra, beige o colores naturales para las piezas grandes o importantes, dejando que los elementos más pequeños como butacas, pufs o cojines sean los que aporten el color, la alegría y el dinamismo a la estancia, con colores o estampados más atrevidos, bajo la premisa de la coordinación para conseguir un resultado final perfecto.
– ¿Lisos o estampados?, ¿cuál elijo? Hoy en día la decoración está abierta a todos los gustos, ideas y mezcla de estilos. Elige lo que más te guste y disfruta. Se llevan las rayas, combinando varios tamaños, las más gruesas con las más finas. Los cuadros vichy son una auténtica locura, aportan vitalidad y modernidad, los estampados vegetales, los estampados étnicos, los geométricos… o los coordinados en una misma gama de colores.
Hay también otros pequeños cambios que nos ayudan a aportar calidez a nuestro salón, como pueden ser:
- Renovar las cortinas del salón. Cambia los visillos blancos y las cortinas vaporosas del verano por telas con una textura un poco más cálida e incluso con color. Los colores beige, topo o con tonalidad grisácea resultan acogedores y elegantes.
- Renueva las fundas de los cojines del salón. Cambiar los cojines es el método más rápido y sencillo para darle la bienvenida a la nueva estación, la clave para acertar es la elección de tejidos con una mayor densidad y calidez como los conseguidos con el terciopelo, la pana, los tejidos con relieve, la lana o incluso los de pelo.
- Las alfombras no pueden faltar en el otoño, abrigan nuestro suelo a la vez que hacen que andar descalzo en casa sea toda una delicia para nuestros pies. La lana es el material por excelencia y el que aporta más calidez, en el mercado se puede escoger entre multitud de medidas, diseños o características, para adaptarse a los gustos de cada persona.
La terraza, otra estancia que debemos aprovechar y decorar
Y por supuesto, con la llegada del otoño no debemos olvidar la decoración de ese otro gran salón exterior que es la terraza. Aprovechar los últimos rayos de sol, bien resguardados del viento y abrigados con una buena manta de lana puede llegar a ser una delicia. En la terraza no pueden faltar unas plantas que además de su función decorativa actúan como pantallas que aíslan térmicamente, así como las velas, algo tan sencillo como acogedor.
